Bill Kirchen en Fun House

Entrada taquilla 20€

El maestro de la Telecaster, Bill Kirchen, lleva más de 50 años como guitarrista profesional. Desde que empezó con una banda en el concurso de talentos para estudiantes de último año de Ann Arbor High School (donde también estuvo Iggy Pop), hasta dar origen al género americano con la “banda country hippie” Commander Cody and his Lost Planet Airmen, este afable austiniano ha estado en innumerables proyectos incluyendo algunos tan importantes como el Jesus of Cool de Nick Lowe, y su amigo Elvis Costello, con quienes ha trabajado y girado repetidas veces.

Mientras llevaba el “Hot Rod Lincoln” de Commander Cody al Top 10 y obtenía una nominación al Grammy a la Mejor Interpretación Instrumental Country, Kirchen creó su propio sonido, y lo bautizó como “dieselbilly”, mezclando su afición por el subgénero de canciones country sobre camiones con el sonido Bakersfield.

La carrera de Kirchen, estando en el lugar correcto en el momento adecuado, le ha puesto a la vanguardia de muchos movimientos musicales, incluido el outlaw country; El álbum de 1974 de Commander Cody “Live from Deep in the Heart of Texas”, grabado en la legendaria sede mundial de Armadillo en Austin, entró en la lista de los 100 mejores álbumes de todos los tiempos de la revista Rolling Stone.

Su estilo se destaca por su equilibrio entre la energía de alto octanaje y la delicadeza. Desde Joven, Kirchen se sumergió en las tradiciones populares y aprendió a amar los tonos de una música sin distorsiones. “Estaba más interesado en sonar como Doc Watson que como Eric Clapton”, admite Kirchen, cuya guitarra principal fue diseñada por Rick Kelly de Carmine Street Guitars a partir de tablas de pino de 200 años recicladas del loft de Jim Jarmusch.

Desde hace un tiempo está acompañado por Malcolm Mills a la batería y Paul Riley al bajo, ambos con un CV que tira de espaldas.